Puertas cortafuegos, diseñadas para salvaguardar vidas y propiedades

Cuando se produce una emergencia, cada segundo cuenta. Por eso, al referirnos a los incendios, disponer de las medidas de seguridad adecuadas es vital. Uno de los elementos más críticos en la protección contra el fuego son las puertas contra incendios o cortafuegos, que, como bien indica su nombre, tienen la función de no dejar pasar el fuego, salvaguardando así vidas y propiedades.

¿Qué son las puertas cortafuegos?

Se trata de un tipo especial de puerta diseñada y construida para resistir la propagación del fuego y el humo durante un incendio. Estas puertas se instalan estratégicamente en edificios residenciales, comerciales e industriales para crear compartimentos resistentes al fuego y controlar así la propagación de las llamas. Su objetivo principal es proporcionar una vía de escape segura para las personas y permitir que los bomberos ingresen al edificio para llevar a cabo las labores de extinción.

Este tipo de elementos se engloban dentro de los sistemas de protección pasiva y, por tanto, su función es la de evitar la propagación, además de facilitar las labores de evacuación en caso de necesidad.

¿Cómo funcionan las puertas contra incendios?

Con la activación de las puertas cortafuegos, las estancias de un edificio se compartimentan y, de esta manera, resulta más difícil la progresión del fuego.

Dada la función principal de separar las estancias de un edificio, es imprescindible que el cerramiento sea fácil y, a su vez, sencilla la apertura para poder salir. Además, hay que tener en cuenta que siempre, durante un incendio, deberán permanecer cerradas. No obstante, normalmente las puertas contra incendios suelen estar abiertas, como es el caso de los centros comerciales u hospitales, y sujetas por un sistema electromagnético conectado a una central de incendios. Así, en el momento en que se produce un incendio, bien localizado mediante los detectores, bien por activación de alarma por parte de usuario, los retenedores de las puertas hacen que éstas se cierren automáticamente.

Fabricadas para resistir

Las puertas contra incendios tienen la característica principal de resistir al fuego, como hemos explicado. Por ello, están fabricadas con materiales especiales, como acero resistente al calor, yeso y materiales cerámicos, que les permiten soportar altas temperaturas durante un período determinado.
En cuanto a la clasificación de resistencia al fuego, se indica en minutos y muestra el tiempo real en el que la puerta puede mantener su integridad estructural y evitar la propagación del fuego. Las clasificaciones comunes incluyen 30, 60, 90 y 120 minutos.

Además de su resistencia al fuego, las puertas contra incendios están también equipadas con sellos intumescentes, que se activan con el calor y se expanden para llenar las brechas entre la puerta y el marco, ayudando así a evitar el paso de humo y gases nocivos y que los ocupantes puedan evacuar el edificio de manera segura.

Puertas cortafuegos Prodein: variedad y diseño

En Prodein contamos con una gran variedad de puertas y accesorios contra incendios. Nuestro objetivo es aportar un servicio integral ofreciendo nuestra profesionalidad desde la elección del material hasta su mantenimiento.

La variedad de puertas es igual de amplia que el tipo de instalación. Así, disponemos de puertas correderas, hechas a medida según cada instalación, puerta acristalada cortafuegos, sistema Innova para puertas que permiten impresión de diseños personalizados, acústicas (aislamiento térmico y acústico) de una hoja o doble hoja.

Consulta toda la gama en nuestra página y, si lo deseas, descarga nuestro catálogo para ampliar información.

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